Martín Aguilar
El Gobierno de la Ciudad de México avanza en la construcción de la Gran Ciclovía Tenochtitlán, un corredor ciclista de aproximadamente 34 kilómetros que conectará el Zócalo capitalino con el Estadio Azteca, atravesando las alcaldías Cuauhtémoc, Benito Juárez, Coyoacán y Tlalpan.
El proyecto, impulsado por la administración capitalina como parte de su estrategia de movilidad sustentable y recuperación del espacio público, contempla carriles en ambos sentidos construidos sobre el asfalto de Calzada de Tlalpan, con el objetivo de ofrecer alternativas seguras, accesibles y ecológicas para los usuarios de bicicleta.
A lo largo de su trazado, la ciclovía contará con 58 bahías de inclusión, espacios seguros que facilitarán el acceso a distintos medios de transporte y promoverán la convivencia entre peatones, ciclistas y trabajadores de la vía pública.
En las zonas donde ya se realizan obras de adecuación y pruebas piloto, la percepción ciudadana ha sido diversa. Mientras algunos celebran la iniciativa, otros piden una mejor planeación para evitar conflictos con el transporte y el comercio local.
"Está bien que se fomente el uso de la bici, pero deberían avisar con tiempo. A veces cierran carriles y no sabemos por dónde pasar", comentó Orlando Gutiérrez, chofer de microbús que recorre la ruta Taxqueña-Centro. "Cuando terminen, ojalá esté bien señalizada, porque muchos ciclistas y autos no respetan los espacios".
Por su parte, Martha Gómez, vendedora ambulante en la zona de Chabacano, reconoció que la obra ha modificado temporalmente su área de trabajo, aunque confía en que traerá beneficios:
Nos movieron unos metros, pero si con esto hay más gente pasando o turistas que usen la bici, nos puede ir mejor. Solo pedimos que nos dejen trabajar tranquilos y no nos quiten el espacio, Martha Gómez
En tanto, José Luis Sánchez, habitante de la colonia Portales, destacó el aspecto ambiental del proyecto. "Ya era hora de tener una vía tan larga y conectada. Si de verdad la terminan hasta el Azteca, va a ser una de las ciclovías más importantes del país. Eso sí, deberían garantizar seguridad, sobre todo de noche".
De acuerdo con la Secretaría de Obras y Servicios (SOBSE), la Gran Ciclovía Tenochtitlán se desarrolla en varias fases. La primera etapa, que incluyó estudios geodésicos, topográficos y fotogramétricos, comenzó el 14 de abril de 2025 y concluyó el 6 de julio. La segunda fase, de estudios geotécnicos y geofísicos, se mantiene activa y se prevé su cierre el 11 de agosto.
La obra civil principal aún no tiene fecha exacta de inicio, pues depende de la conclusión de los estudios preliminares, aunque los contratos de licitación contemplan un plazo de ejecución de 120 días naturales.
En paralelo, durante mayo de 2025 se publicaron licitaciones para tramos complementarios en Insurgentes Sur, con una duración estimada de 90 a 100 días, lo que permitirá interconectar distintas ciclovías de la red metropolitana.
Para septiembre de 2025, se reportan avances visibles en varios puntos del corredor: renovación de banquetas, jardineras, señalización y adecuación de carriles. En algunos tramos ya se observa tránsito ciclista de prueba y presencia de brigadas de obra
El gobierno capitalino busca que este proyecto esté operativo antes del Mundial de Futbol 2026, cuando la Ciudad de México será una de las sedes oficiales del torneo. La meta es ofrecer infraestructura moderna y sustentable que incentive el uso de la bicicleta como medio de transporte urbano y de turismo deportivo.
Para ello, la administración local ha realizado rodadas exploratorias con colectivos ciclistas, asambleas informativas en las alcaldías que atraviesa el proyecto y consultas con vecinos sobre la distribución del espacio vial.
La Gran Ciclovía Tenochtitlán, explican las autoridades, no solo busca mejorar la movilidad ciclista, sino también reducir accidentes viales, disminuir la contaminación y fortalecer la convivencia social.
En palabras de Eduardo Gutiérrez, repartidor en bicicleta que transita a diario por Calzada de Tlalpan, "una vía así nos cambia la vida. Ya no tienes que ir pegado a los coches o jugarte la vida en los cruces. Ojalá no la dejen a medias y sí la conecten completa".
El proyecto, aseguran funcionarios locales, avanza conforme al cronograma establecido, con entregas parciales programadas para el cierre de 2025 y la expectativa de que se convierta en uno de los ejes de movilidad ciclista más importantes de América Latina.